Implantes cocleares30-11-2020
Oir tiene un proceso que no es sencillo . Desde la recepción de los sonidos que atraviesan el oído externo llegando al interior en el camino que recorren hasta el tímpano hasta las ondas sonoras que ponen en marcha los huesecillos del oído, que permite con su movimiento que los fluidos del oído interno también se muevan haciendo que las células cilíadas lleven a cabo la transformación de estas vibraciones en impulsos eléctricos.
Esto que hemos resumido en unas líneas parece sencillo pero no es así. Un oído interno en plenas facultades contiene más de 30.000 células cilíadas. Son células que no se reproducen y que, además, son muy frágiles . Cuando estamos sometidos a mucho ruido estas células envejecen de forma prematura reduciendo la capacidad auditiva.
Hay algunas personas que al nacer experimentan problemas en las células cilíadas que las impide oír. Como consecuencia caen en una sordera profunda. Una de la soluciones para recuperar una audición normal en los casos de daños en las células cilíadas son los implantes cocleares.
Desde mediados del siglo XX los implantes cocleares se postularon como la mejor solución para los problemas más graves de sordera . En España casi diecisiete mil personas disponen de un implante coclear. La proporción de estos implantes es de casi un sesenta por ciento en personas adultas y un cuarenta por ciento en menores de edad.
Para que las personas con implantes cocleares tengan una experiencia auditiva eficaz en entornos públicos es necesaria la instalación de bucles magnéticos que ayudan a la comprensión en lugares donde la audición no es sencilla y con ruido (oficinas). También en otras con condiciones acústicas complejas como los cines o teatros.
Cuando los audífonos no pueden solucionar el problema de audición, el implante coclear es la mejor alternativa.